(CABA) Con un espléndido día de sábado en el barrio de Boedo comenzó la 5ta edición del Festival de Tango Independiente que seguirá una nutrida programación hasta el 23 de marzo en varias sedes. En la misma fecha, el Centro Cultural Gloria Montoya en Paraná y el Paseo de las Artes en Córdoba capital también fueron sitio del acontecimiento.
Gran parte de las actividades de este Festival se desarrollan en el Área Metropolitana de Buenos Aires (Ciudad Autónoma de Buenos Aires, La Plata, con eventos en Bánfield, Témperley, Quilmes y Valentín Alsina), mientras que desde el miércoles 19 hasta el domingo 23 la capital de la República Oriental del Uruguay, Montevideo, sumará una importante cuota de conciertos, charlas y milongas. Rosario y Mendoza harán lo propio durante el fin de semana.
Frente al escenario emplazado en Boedo y San Ignacio, rodeada por un público atento, la Orquesta Juvenil de la Ciudad de Buenos Aires abrió la jornada. Los organizadores y distintos oradores contaron la complicada situación del director, Claudio Spector; cuya reincorporación al cargo se encuentra aún sin definir a pesar de la intervención judicial que llevará al Gobierno local a una audiencia el día martes 25/03.
Más tarde, una artillería compuesta por Altertango, OT La Vidú, Amores Tangos, Violentango, Quinteto Negro La Boca y La Siniestra, descargó con potencia sus repertorios nuevos y una notable amplitud de cruces con otros géneros (rock, rap, folklore). Finalizadas las presentaciones Alan Haksten (Unión de Orquestas Típicas, Marcapiel) nos brindó su balance:
Me parece que lo bueno es que se mostró todo ese nuevo estilo de tango y que lo bueno de comenzar con esto es mostrar lo que va a ser el Festival toda la semana; que la gente ya se vaya con esa idea de que el tango nuevo parte también de esta estética: que haya 3 grupos con batería, con bajo eléctrico, quizás es algo que en otros años no se dio y hoy ya es casi una tendencia, que haya una mixtura con el rock muy fuerte.
En la milonga El Tacuarí, programada para el segundo día, tuvimos la oportunidad de charlar al respecto con uno de los protagonistas de este proceso de “actualización” que parece haber madurado y estar dando frutos de forma ascendente. “El festival es la exposición de un movimiento que va creciendo año a año. Era impensado hace 20 años cuando yo arranqué con el tango” dijo Julián Peralta, tras participar con Astillero, señalando además que “desde hace 10 años a esta parte, primero de una manera muy incipiente, cada vez se está avanzando hacia que la mayoría de los músicos esté haciendo su propia obra, su propia música y sus propias letras. La mayoría de los grupos que tocan en el Festival de Tango (Independiente) tocan música nueva».
Otro enfoque sobre esta novedad en lo que se refiere a composiciones y letras presentes en los conciertos del Festival, se manifiesta en las agrupaciones que buscan continuidad con el tango bailado. Su música es pensada desde lo rítmico y, en palabras de Luigi Coviello de OT La Andariega, en «que se pueda transformar en movimiento”. Es un tango que todavía quiere generar el abrazo y ganar espacio en las milongas.
Lo que se vuelve cada vez más claro es que, despejando la bruma de la ideología del tango está muerto y la invisibilización de los esfuerzos que van en sentido opuesto, encontramos toda esta diversidad de cosas que están pasando… y están pasando todo el año.
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Cintia Barrionuevo es socióloga y cantora. Twitter: @cintiatango