Entre las diferentes definiciones que hay del término «Rantifusa» encontramos la siguiente: «Persona que tiene una conducta reprochable.» Esta agrupación de mujeres tangueras desafía al público con una propuesta provocativa, cuestionadora de usos y costumbres en el ámbito del tango. Vienen a proponer su visión original y personal, a decir sin vueltas… «Con y sin permiso». La Rantifusa presenta hoy su primer trabajo discográfico en el Club Atlético Fernández Fierro. Charlamos con la cantora Natalia Martínez sobre la orquesta y su propuesta.

 

¿Cómo empezó todo esto con La Rantifusa?
Natalia Martínez: Las primeras que nos juntamos fuimos Patricia y yo, que un día nos pusimos a charlar en “La ventanita de arrabal”, así que nuestros amigos del Sexteto Fantasma tienen algo que ver con el comienzo de La Rantifusa. Y charlando ahí en la milonga nos dieron ganas de encontrarnos y trabajar sobre lo que queremos decir con el tango, y desde una orquesta.
Sentimos también las ganas de trabajarlo con otras mujeres, queríamos probar eso de hacerlo solo entre mujeres, de sentirnos en confianza, de experimentar con esa energía que se da entre nosotras. El trabajar desde una perspectiva de género no fue algo consciente a priori, fue más bien una consecuencia.
Cuando fuimos convocando a las otras chicas, fuimos completando los criterios musicales y estéticos. Hay cosas que fueron tomando forma más nítida cuando estuvo el grupo y cuando tomó forma como orquesta. Por ejemplo nos preguntamos, ¿qué es lo que nos movilizaba a las 8 (y ahora 9) integrantes? ¿Qué es lo que nos unía en relación al tango? Por un lado es el aspecto musical, esa fuerza imparable que tiene el tango, la fuerza que tiene en lo rítmico, en lo armónico y en lo melódico.
Y es también el caminar, el avanzar. Eso de lo que habla Gustavo Varela en uno de sus escritos, esto de avanzar a pesar de todo. Por eso coincidimos también en la necesidad de revisar ese “ruido” que nos aparecía en la poética, desde nuestra mirada de mujeres de hoy. Porque claro, es una poética que se escribió en otra época. Nosotras no tenemos otra posibilidad que mirarla desde nuestra óptica actual. No queremos dejar de valorar la obra que se compuso en aquellas épocas porque la consideramos muy valiosa. Nos parece interesante mostrar los cambios que hubo de un tiempo al otro, para la mujer y para la sociedad. Porque el patriarcado apresó tanto a las mujeres como a los hombres. Hacer estos movimientos o intervenciones con las letras es una manera de liberarnos.

Y ahora presentan “Con y sin permiso”, su primer trabajo discográfico. ¿Cómo trabajaron la idea de este repertorio?
N.M: El disco se llama “Con y sin permiso” porque en este título resumimos esta idea de intervenir los tangos. Es una forma que encontramos de volver a decirlos desde el lugar en el que estamos hoy. Cuando nos planteamos qué nos sucede a nosotras como mujeres con las letras de los tangos y qué lugar se nos da en esas letras, encontramos distintas maneras de intervenirlos. La idea de estas intervenciones siempre fue que sean una invitación, de generar la inquietud de hacer pensar sobre estas cosas. Con la intención de conmover, de transformar, siempre desde un lugar de iluminar, sin la intención de imponer. Por eso el humor, que es un buen recurso para esto.
Algunas intervenciones son a través de personajes que creamos. Otro recurso fue silenciar una parte o varias partes de la letra para, en esa ausencia, invitar a esa reflexión. Otra idea fue tomar temas de a pares, digamos haciendo parejas de temas, por un lado un clásico, y por el otro un tema actual. Y dentro de esta definición “actual” para nosotras entra todo aquello que nos habla de lo que nos importa hoy. Como el tema de Charly “Alicia en el país” que fue escrito en los ’80. O un tema de El Príncipe que también nos habla con un lenguaje que nos resuena como actual, aunque ese tema lo escribió en los ’90.
Todas estas ideas y conceptos fueron armando la idea del disco que hoy presentamos, y que es en formato digital. Cada vez es más usual escuchar música desde dispositivos móviles por eso nos pareció también interesante presentar este disco en este formato. Acompaña el arte de Carolina Pastorella, en diversas piezas como pins, o un desplegable impreso, remeras, etc. Con cada pieza se incluye un código QR de descarga del disco.

 

La Rantifusa en vivo
Viernes 6 de diciembre a las 21 hs.
en el Club Atlético Fernández Fierro
Sánchez de Bustamante 772, CABA.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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